“No estamos en guerra con los microorganismos”

Una invitación a conocer y valorar a los microorganismos que habitan nuestro cuerpo es la que realiza la exposición transdisciplinaria “Somos un ecosistema: Un viaje por el microbioma humano”. Utilizando diversas manifestaciones artísticas, la muestra presenta situaciones cercanas -desde una mirada local-, para abordar conceptos científicos que ayudan a entender a estos cruciales organismos microscópicos.

Por ello, la apuesta de esta exposición es “mostrar cómo convivimos en conjunto, fuera de ese orden jerárquico, sino como un ecosistema”, dice Ale Garín, PhD en Biología Marina que dirige el proyecto, y agrega que “es una reflexión y viaje por estos microorganismos que no vemos a simple vista, pero están en todas partes”.

Se llama microbiota al conjunto de microorganismos que habitan un ser o espacio; mientras que el microbioma comprende la relación e interacción entre el microbiota y el lugar que habitan. En nuestro cuerpo hay más microorganismos que células humanas, sin embargo, se tiende a catalogarlos como “bichos malos”.

Lejos de ser una amenaza, desde el equipo del proyecto explican que el microbioma humano es una parte fundamental para procesos fisiológicos como la digestión, el desarrollo del sistema inmune o la producción de ciertas vitaminas. Características que, en la muestra, se grafican mediante obras como una ilustración de la relación cerebro-microbioma intestino, la pintura de una mujer amamantando; o bien otra que dice “No estamos en guerra con los microorganismos”. El COVID-19 y SARS-COV-2. también tienen un lugar en la muestra.

Hasta el 11 de febrero la exposición estará en el Hospital Clínico Universidad de Antofagasta (previamente estuvo en el Centro Cultural Estación) y a través Somos Un Ecosistema está disponible un recorrido en video, las charlas y el material de apoyo generado por el proyecto.

Como una huella digital

Ale Garín aclara que el microbioma es dinámico, único para cada persona, aunque hay un grupo de microorganismos que es relativamente constante entre las poblaciones humanas, hay grupos únicos en cada individuo que se definen por nuestras raíces, nuestra alimentación, lugares que habitamos, con quienes convivimos y la parte del cuerpo en que se encuentra.

Por ejemplo, debido al contacto con el exterior, el microbioma de la piel es el que más varía. Y en la piel, el de las manos es distinto al de la piel de zonas del cuerpo que habitualmente están cubiertas; en contraste, uno de los microbiomas más estables es el de los genitales. Por su parte -explica Garín- el microbioma intestinal conocido como flora microbiana, alberga a la comunidad más abundante en nuestro cuerpo, es muy variable, diverso, ayuda a degradar alimentos y es de uno de los más estudiados.

Entre los datos curiosos de la muestra, se menciona que, entre las parejas, los microbiomas se van pareciendo más con el tiempo, sin perder la identidad individual. Y en caso de una ruptura amorosa, lentamente cada uno va “recuperando” el suyo.

El proceso

No fue fácil para el equipo del proyecto generar un relato que muestre el lado beneficioso de los microorganismos, sobre todo en medio de la pandemia. “Esa idea de unos contra otros, que son enemigos, fue lo más complejo de abordar”, comenta Ale Garín.

El trabajo previo incluyó levantamiento de información con estudiantes de octavo y primero medio para diagnosticar qué sabían de microbiología y cuáles eran sus intereses. Descubrieron que el tema “les sonaba” -eso sí- asociado a la visión de patógeno o probiótico, y que les daba miedo que estén en todas partes.

“Adaptar a una narrativa cercana y definir cuál sería el mensaje de la muestra fue un trabajo en equipo muy articulado”, destaca Garín y comenta que el proceso les ayudó a acotar la información, “porque ocurre mucho eso de querer contarlo todo”.

Ya con la muestra instalada, realizaron charlas y talleres. Estos últimos, además de los cultivos de microorganismos, utilizaron expresiones artísticas como la poesía o el dibujo para acercar y facilitar la comprensión de este micromundo.

“Somos un ecosistema: Un viaje por el microbioma humano” es una de las 36 iniciativas financiadas por el Concurso Nacional de Proyectos de Divulgación y Socialización del Conocimiento 2020 del programa Ciencia Pública de Minciencia.

Para saber más

Menú